El góber sin "laics"

Ahora resulta que los ciudadanos buscamos "afectar la imagen del gobierno" cuando lo único que se pide es hagan su trabajo... Foto: Especial

Por: @inforneutra

Qué vergüenza que sepa todo el país, que necesitan de aprobación, y lo peor, que obligan a la gente, en la nómina, a que les “aplauda”…

“Si no es por amor, es a fuerza”, dijera ese dicho popular.

Esa validación extrema, esa necesidad constante de aplausos, esa soberbia para imponerse, solo denota aun ser totalmente gris y mareado en el poder.

Ebrio de vanidad…

Esa búsqueda excesiva de atención, ya es patológica y enfermiza, digna de estudio de un especialista en salud mental

La liga se rompe de tanto estirarla y los empleados del gobierno estatal empiezan a cansarse…

Que el Rafita de Acatzingo recuerde a su padre político, que se sentía el próximo prócer de la República… el próximo Benito Juárez, y resultó ser solo un “Precioso despreciable”… aborrecido por toda la clase política pese a que, a billetazos, quería meterse en todas partes…

Siempre hemos dicho, nuestro góber tiene esa urgencia por desmarcarse y quitarse con fuego de la frente, el estigma de “marinista”, que hoy, con nuevos bríos, a través de los juniors, sostiene a los seniles miembros de esa casta con el poder nuevo conferido por la 4T; ese MARINISMO que quiso permear como la humedad en una pared, y que ya todos olvidaban… ahora robustecido, ficticiamente, en la figura de Alejandro Armenta MIER… el orgullo del grupo.

La humildad no se le da a este nuevo grupo que gobierna, que deben tener presente que el poder tiene vigencia, y que las verdaderas exigencias del colectivo, no dan tregua a un gobierno de “vedetismo”, ni reflector forzado… exige un pleno compromiso a la palabra empeñada, de cuando tomaron protesta… simple.

La gente quiere ver resultados, no dar “laics”, que laven la cara a las #AArmentiras y la simulación.

¡Oh, sí!